viernes, 28 de marzo de 2014

Para volar necesito dos palabras

Recordando un poema del libro Nueva dimensión, 1996, al poeta y académico venezolano: Miguel García Mackle, extraigo un fragmento que me da una inspiración nueva. Inicia su poema: "Rodrigo de Triana" de esta forma:
 ...
"Como soñando en esta tierra mía
grito, como gritó ¡tierra! Rodrigo de Triana,..."


Una se percata del terreno que pisa,
sabe de sus pies y donde están pero se navega en ilusiones;
¡Aún cree que puede gritar tontamente... ¡Tierra!
-Como Rodrigo de Triana!
Una es vigía silenciosa del tiempo en paralelo
sobre su propia nave;
conociendo las virtudes que acompañan,
la única carga de la que se dispone
para remar a..., ¡quién sabe dónde!

Se ha cumplido,
si se ha sembrado la fanega.
Conocemos lo que nos arraiga, 
la fuerza de la tierra, su poder..., el Amor
pero también todo lo contrario
y, aún así, apenas sabemos un poco de este todo;
por eso mi voz de mujer se halla en el fuego de la sangre
en cada hijo, pero al buscarme sólo hallo el nombre de un poema
Sé que me atrapa mi historia y no puedo desprenderme de ella,
sé que se agazapa la muerte en cualquier vigilia;
que todo puede ser un sólido argumento
porque no puedo mentirme para creerme otra
aunque la desnudez es la ropa que me cubre.
Tampoco puedo inventarme para seguir viva
si sigue ardiendo en mí el tronco de mis antepasados.
Aún soy isla y el mar es tormentoso.
Sé que el mundo en el que estoy no es un cancionero romántico,
sin embargo sigo pidiéndole a la vida que me haga volar
pues al buscar mis alas me sigo hallando en dos palabras.

Elisa
2010
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Las ranas saben, los hombres piensan, el aire lleva, los sueños quedan; mas un silencio todo lo encierra.
(Elisa Lattke-09)

jueves, 20 de marzo de 2014

Ansias de cambalaches


Insiste el sueño a la ausencia
escondida por el alma
en la fronda más oscura
de un corazón que se calla.
En su calma la premura
latiendo en los pensamientos,
con su pulso acelerado
en rito de sus momentos.

Viene un recuerdo marchito
en las noches azabaches
de soledad o abandono,
ansiando algún cambalache.
Fusión de anhelo atrevido
litigio de tantas cosas,
se desdibuja el sentido
donde florecen dos rosas.

¡Ay del ansia si despierta
al llanto ardiendo en la ojera,
ay, si resuenan tambores
y a los cuerpos los serena!
No pasa el tiempo contento
ni pasa siempre olvidado,
el llega pronto y doliendo.
y las horas han volado.

Como cascada aligera
la cadencia de la vida
derrama en su primavera
toda nostalgia querida.
Y quien pasó con su paso
por todas las estaciones,
va cerrando su regazo
a todas sus ilusiones.

A. Elisa Lattke Valencia


Tentación


Foto: alattkeva

Cítame en noches de luna
donde florecen los lotos,
deja que pasten los sueños
sobre los lagos del fiordo.
Que Dios aguarda en las tardes
para sentir tus silencios
acurrucado en mis ansias

para sentirme en el viento.

Deja que te lleve en mí
y que se eternice el sueño,
marcando huellas de suertes
mientras repasa a los cuerpos,
la tentación siempre espera
con la puerta ya entornada,
para sentir el vacío
del raudo tiempo que pasa.

Que me alimente de ayeres
sobre los pasos desnudos,
de un deseo sin templanza,
colgado va por los versos;
en estrofas de esperanza.

Déjame saborear la vida
oxidada por el tiempo,
¡llévatela bien despacio
como el humo del incienso!
Sáciame tantos sueños
por las lluvias clandestinas
cuando duermen los helechos.

Talvez, me sienta chiquilla,
luciérnagas en el pecho
en el ritual de la danza
con los duendes al acecho.
Deja que duerma por fin
y se conjuren milenios, 
arrullando un rayo de sol
que iluminó mi aposento.

Cítame en noches de luna
donde florecen los lotos,
deja que pasten los sueños
sobre los lagos del fiordo.
Que Dios aguarda en las tardes
para sentir tus silencios
acurrucado en mis ansias

para sentirme en el viento.

A. Elisa Lattke V
Trondheim-(Nor) 2/3/2014